Día Internacional de la Madre Tierra 2022
En la Amazonía surinamesa, las comunidades indígenas Christiaankondre y Langamankondre del Pueblo Kali’na, viven en armonía. Históricamente, han sido un pueblo dispuesto a proteger la riqueza ambiental del territorio y de la reserva en la que por cientos de años ha convivido en comunión con la naturaleza. Ambas comunidades, con el fin de favorecer una adecuada representación de sus intereses ante las instituciones de gobierno, la comunidad internacional y los espacios locales y regionales de interlocución, conformaron Galibi, una organización liderada por representantes de ambas comunidades y que trabaja en favor del bienestar y la calidad de vida de sus habitantes , desde diferentes áreas de impacto, como proyectos de salud, gobernanza, gestión de recursos naturales y medios de vida, entre otros.
Galibi se encuentra dentro de una reserva natural, y su territorio es parte de un banco de arena, que es una barrera natural formada por elementos como piedras o rocas, a lo largo de un litoral. Para llegar al territorio de Galibi es necesario realizar un viaje en lancha a lo largo del río Maroni (o Marowijne en neerlandés), y el único medio de transporte dentro de la reserva son las cuatrimotos.
Vivir en una zona de difícil acceso ha favorecido la preservación y conservación de la flora y fauna, y en general del bioma amazónico donde se encuentra Galibi, pero esto también supone una dificultad en la gestión de desechos, pues es muy complicado y además de costoso, movilizar los desechos hacia una zona en donde se les dé un adecuado manejo.
Por este motivo, el gobierno de Surinam le entregó a Galibi un incinerador de basura, sin embargo, para su funcionamiento son necesarios insumos adicionales y capacitaciones. Esto no frenó a los líderes de Galibi, que no se quedaron con los brazos cruzados, así que, en conjunto con la comunidad, identificaron la necesidad de desarrollar un completo sistema de gestión de residuos. Como protectores del ecosistema y defensores de la naturaleza, era momento de que la misma comunidad liderara un sistema de manejo sostenible de los residuos que dejaban sus actividades de consumo. Un compromiso colectivo por el mismo objetivo común: salvaguardar su hogar, la selva amazónica.
Con apoyo del proyecto de Fortalecimiento de Capacidades de Organizaciones Indígenas en la Amazonía (SCIOA por sus siglas en inglés) financiado por USAID, la articulación con Green Heritage Fund Suriname (GHFS) y la orientación técnica de VIDS, socio de SCIOA en Surinam, Galibi diseñó e inició la implementación de un sistema de gestión de residuos que complementa el incinerado de basura e incluye manuales y procedimientos para la prestación del servicio de recolección y tratamiento de residuos en la reserva, la movilización y sensibilización de acuerdo con las principales recomendaciones para el manejo de residuos, y la generación de consciencia sobre la importancia del cuidado del medio ambiente.
Este esfuerzo de Galibi es una práctica innovadora dentro de los sistemas de gestión en las organizaciones indígenas, en este caso, producto de una iniciativa colectiva para la preservación del ecosistema amazónico en el que conviven dos comunidades que reforzarán sus lazos para involucrarse directamente en un proceso de aprender haciendo.
Gracias a su sistema gestión de residuos, Galibi continúa fortaleciendo su liderazgo y comienza a posicionarse localmente como una organización indígena referente en la lucha contra el cambio climático y sostenibilidad de la Amazonía.